Psicoanálisis, psicología, psicoterapia… Éstos son conceptos que muchas veces se confunden. Hoy explicaremos en qué consiste el primero.
El padre del Psicoanálisis
Sigmund Freud (1856-1939) es uno de los personajes más influyentes del siglo XX por sus contribuciones al estudio de la mente humana. Además, abrió un nuevo panorama para la investigación de los problemas culturales, de la religión y la sexualidad, entre otros.
En este artículo, te presentamos una perspectiva general acerca del hallazgo teórico y práctico que le dio fama mundial: el Psicoanálisis.
¿Qué es?
En un artículo escrito para una enciclopedia alemana, Freud señala que el término psicoanálisis se refiere a tres cosas:
- Procedimiento que sirve para investigar procesos anímicos difícilmente accesibles por otras vías;
- Método de tratamiento de perturbaciones neuróticas, y
- Conjunto de conceptos psicológicos, descubiertos por ese camino, que poco a poco han integrado una nueva disciplina científica
Entonces, el Psicoanálisis es un método de psicoterapia, pero, además, se trata de una teoría de la personalidad y un instrumento de investigación científica. Vamos a revisar brevemente estos aspectos.
Investigación de nuestros procesos anímicos
Antes de Freud, se consideraba que los seres humanos estábamos definidos por la racionalidad y que la consciencia era nuestro distintivo fundamental. Así lo expresa, por ejemplo, el filósofo francés René Descartes con su célebre frase “Pienso, luego existo”. De modo que, durante varios siglos, se consideró que lo único que nos identifica como personas es ser pensantes.
En este sentido, una de las aportaciones más importantes del Psicoanálisis fue el descubrimiento del inconsciente. Se trata de una instancia de nuestra psique que está “detrás” de una serie de procesos que influyen en nuestros actos y nuestras decisiones.
De acuerdo con Freud, la existencia del inconsciente se puede demostrar a partir de fenómenos cotidianos que experimentamos todas las personas. Podemos citar: los sueños, los lapsus o equivocaciones que cometemos al hablar, los olvidos o errores que tenemos por falta de atención, entre otros. Estos procesos nos hacen saber que nuestra personalidad es muy rica y abarca mucho más que la consciencia: también somos inconsciente.
La terapia psicoanalítica
El descubrimiento del inconsciente le permitió a Freud proponer un nuevo enfoque terapéutico para tratar los problemas psicológicos. Mediante la técnica denominada asociación libre, se invita al paciente a permitir que las ideas, sentimientos o recuerdos fluyan sin una lógica racional.
A partir de la escucha atenta de estas comunicaciones, el Psicoanálisis busca acompañar al analizado a conocerse mejor. Al ir descubriendo sus motivaciones inconscientes, la persona estará en condiciones de encontrar opciones de respuesta más sanas y favorecedoras para ella.
Aquí nos encontramos con una de las características más interesantes y distintivas del Psicoanálisis. El ejercicio de investigación personal que hace el paciente es al mismo tiempo el procedimiento que logra la cura. Esto significa que, a medida que la terapia le permite conocerse mejor, también le da herramientas para modificar su personalidad.
El Psicoanálisis como disciplina científica
A pesar de que han transcurrido más de 80 años de la muerte de Freud, sus descubrimientos continúan teniendo una enorme relevancia. Así lo afirma Eric Kandel, uno de los más destacados científicos de nuestra época, ganador del Premio Nobel de Medicina, en 2000.
De acuerdo con este investigador austríaco, el modelo de la mente establecido por Freud sigue siendo el más coherente y satisfactorio. Esto le ha permitido al Psicoanálisis mantener su vigencia en el panorama teórico y entrar en diálogo con las Neurociencias contemporáneas.
En nuestros días, el Neuropsicoanálisis investiga los puntos de contacto entre la perspectiva del Psicoanálisis y los hallazgos de las distintas ciencias del cerebro. Esta interacción ha permitido lograr una mejor comprensión de nuestros estados emocionales, cognitivos y de nuestra vida psíquica, en general.
¿Cuándo acercarse al Psicoanálisis?
A partir de lo anterior, queda claro que acudir al psicoanalista no tiene que ver con estar loco o tener problemas serios. El Psicoanálisis puede ser de gran ayuda en múltiples situaciones de nuestra vida. Es una herramienta de apoyo para quienes desean investigar en sí mismos cómo funciona su mente y sus motivaciones inconscientes.
También es útil para los que atraviesan por situaciones que los hacen replantear su visión de sí mismos y de su entorno. Un divorcio, despido, muerte de un ser querido o nacimiento de un hijo pueden ser momentos propicios para iniciar un tratamiento psicoanalítico.
Quienes sufren de estados crónicos de ansiedad o tristeza, están luchando contra las obsesiones o los miedos irracionales son buenos candidatos. Si no te sientes satisfecho con tus logros, fracasas repetidamente en tus proyectos, o estás atrapado una y otra vez en relaciones destructivas, puedes requerirlo.
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Jesús Ayaquica Martínez es licenciado en Filosofía, maestro en Psicoterapia Psicoanalítica y doctor en Psicoanálisis, todo por la Universidad Intercontinental. Imparte clases en Filosofía, Administración a nivel licenciatura y posgrado. Fue editor de la desaparecida revista Avatares, publicación de Filosofía; es miembro de los consejos editoriales de Intersticios. Filosofía, Arte, Religión, y la Revista Intercontinental de Psicología y Educación, publicaciones científicas del programa de Filosofía y del de Psicología, respectivamente. También se ha desempeñado en la consulta psicoanalítica independiente.
