Organizada por la Coordinación de Difusión Cultural, el 1 y 2 de febrero, en la Terraza Fray Toribio Benavente (Pérgola de la Cafetería) se llevó a cabo la Feria del tamal y el atole, motivo por el cual se congregaron un buen número de integrantes de la comunidad UIC.

El Día de la Candelaria se festeja el 2 de febrero en conmemoración a la Virgen con el mismo nombre, nace en las Islas Canarias, España; donde se festeja con un desfile militar ante el presidente y el rey, la fiesta se extiende por varios días y se realiza en la Basílica de la Virgen de la Candelaria. En ese sentido, de acuerdo con la religión católica, en esta fecha se realiza la purificación de la Virgen María después del nacimiento del niño Jesús, quien lo llevó hasta una iglesia para hacer este ritual después de 20 días del parto, es decir del 24 de diciembre al 2 de febrero.

En nuestro país, se acostumbra que la persona a la que le salió el niño en la Rosca de Reyes es la encargada de traer tamales y atole; la tradición se debe a que, en esa misma fecha, basándose en el calendario azteca, es la bendición del maíz, y se elaboran alimentos con él. Además, es tradición vestir al Niño Dios en esta fecha y, una vez vestido, se lleva a bendecir para la prosperidad de la familia.

Asimismo, debe mencionarse que, durante la Conquista, en México, los pueblos indígenas rendían culto a sus deidades y uno de sus rituales era la celebración del inicio del Atlacahualo, fecha en la que se regaban los campos y se rendía tributo con mazorcas de maíz a los dioses Tláloc y Chalchiuhtlicue. Lo anterior con el objetivo de que las deidades ayudaran a tener buenas cosechas durante todo el año.