El martes 2 de abril del presente año, dentro del programa “Iniciativas UIC” de la Coordinación de Vida Universitaria, se llevó a cabo el evento de donación de trenzas en conjunto con la fundación Siempre Luchando, que brinda apoyo a mujeres que luchan contra el cáncer de mama y, entre otras cosas, requieren de pelucas oncológicas para mejorar su calidad de vida.

La iniciativa fue presentada por la estudiante Doris Calderón Navarro, quien actualmente cursa el segundo semestre de la Licenciatura en Nutrición y, durante su estancia en la universidad, ha participado activamente en diversos programas de Formación Integral, en las áreas de Pastoral, Actividades Deportivas y Vida Universitaria. Su preocupación por este sector de la población se debe a la reciente partida de la madre de un amigo, quien perdió la batalla contra el cáncer.

Durante el evento, se colocó un stand en la Explanada de Nuestros Fundadores, contando con la presencia de una estilista por parte de Siempre Luchando y de Doris, quienes recibieron a las voluntarias que se cortaron el cabello para donación y recibieron trenzas cortadas en otro sitio. En total, se recolectaron un total de 53 trenzas. Cabe mencionar que para la producción de una peluca oncológica se requiere un aproximado de siete trenzas, por lo que la aportación de la comunidad UIC contribuirá a la elaboración de entre siete u ocho pelucas.

Sobre su experiencia en el programa “Iniciativas UIC”, Doris nos comparte: “La UIC me ha dado aprendizajes, crecimiento, oportunidad de desarrollarme y comprenderme a mí misma.  Hay dos cosas importantes para mí: considerar que quien está al lado de nosotros tiene una vida y una historia. En la medida que te involucras con el otro puedes hacerlo crecer. Si realmente nos involucramos en la vida de otros, vamos a lograr los objetivos que nos propongamos. El segundo: no hay manera de levantar lo que tengamos que levantar si no es en equipo, todos llevamos un cachito de responsabilidad desde donde estamos. Ese es uno de mis aprendizajes más grandes aquí. Es algo con lo que yo predico y trabajo mucho.  Desde la primera vez que puse un pie en la UIC, me enamoré y sigo amando profundamente esta institución y lo que representa”.

Por su parte, la estudiante de Bachillerato Luciana Jiménez Figueroa, quien donó 30 centímetros de su cabello, nos comparte sobre su experiencia: “Esta fue la primera vez que done mi cabello, me enteré de esto un día antes de ir a cortarlo. Mi hermano me preguntó si quería hacerlo y le conteste que estaba loco, que no había manera. Pero el día siguiente estaba viendo historias de WhatsApp y me encontré con una foto del cartel de la iniciativa. Y lo pensé y dije, pues ¿por qué no?, mi cabello puede crecer y hay mujeres que lo pueden aprovechar mucho más de lo que yo podría. Al empezar, me sentí nerviosa porque he pasado tiempo cuidando mi cabello, pero una vez que terminaron de cortar la trenza, me dio mucho gusto saber que hay algo que pude hacer que podría mejorar  la vida de alguien más”.

Si tú, como Doris, tienes una iniciativa de emprendimiento o acción social para desarrollar en la universidad, acércate a la Coordinación de Vida Universitaria y preséntanos tus ideas. Nos encontramos en el edificio América, Planta Baja, aun lado de la tienda UIC.